¿Qué efecto tiene esta técnica sobre mi músculo dañado?
Gracias a la punción seca se relajan y desbloquean, por acto reflejo, las fibras del músculo dañado. El músculo se regenera de forma más rápida y aliviamos de forma inmediata el dolor.
Esta técnica se puede utilizar en casos de traumatismos, sobrecargas y contracturas musculares. También en la fatiga muscular y dolor de espalda.
Después de 24-48 horas de acudir al fisioterapeuta, el músculo se relaja y desaparece el dolor local y el dolor irradiado.
Lo que logramos al introducir la aguja en el punto gatillo es generar una presión y contracción del mismo que deja de emitir acetilcolina (un neurotransmisor encargado de la contracción muscular) disminuyendo el dolor. El objetivo es, como hemos indicado anteriormente, producir una relajación del músculo.
Esta práctica combinada con otras técnicas de Fisioterapia, como la terapia manual, representa una de las técnicas más eficaces para el tratamiento de los puntos gatillo, ya que le ayudará a contraer el músculo afectado hasta producir su relajación.